- Una medida clave es colocar un cerco que las rodee por completo y mantenerlo cerrado a toda hora.
- Debe evitarse dejar baldes, palanganas y/o piletas inflables con agua, ya que los niños y niñas pueden ahogarse en recipientes de poca profundidad.
- Siempre es necesaria la supervisión de una persona adulta responsable.
El Ministerio de Salud brinda consejos para disfrutar del agua en forma segura y responsable con niños y niñas.
Una indicación fundamental es proteger las piletas domiciliarias con un cerco que las rodee por completo -con una altura mínima de un metro– y mantenerlo cerrado a toda hora.
Además, es fundamental no dejar objetos cerca del cerco que les permitan a los niños y niñas treparse, como mesas, sillas. Tampoco dejar elementos o juguetes que llamen su atención, ya que pueden intentar buscarlos.
Es importante subrayar que los niños pueden ahogarse en pocos centímetros de agua, por lo que se debe evitar dejar baldes, palanganas y/o piletas inflables con agua, que deben ser vaciados y guardados luego de su uso.
Con respecto a flotadores, colchonetas o juguetes inflables, deben utilizarse con la supervisión de una persona adulta, ya que pueden pincharse, tener pérdidas de aire, y no siempre son eficaces para sostener la cabeza fuera del agua.
En ese sentido, los dispositivos más apropiados son los chalecos, que deben tener broches seguros y correa en la zona inguinal y estar correctamente colocados. Cabe aclarar que su uso no libera de la supervisión por parte de una persona responsable.
Asimismo, se debe evitar correr alrededor de las piletas y prestar atención a las superficies mojadas que puedan ocasionar golpes o caídas.
También es necesario tener cuidados adicionales en ríos, mares o lagos. En estos cursos de agua, se recomienda que los pequeños menores de dos años solo permanezcan en la orilla y sujetos en todo momento por una persona adulta.
Otro aspecto a tener en cuenta es acordar algunas medidas protectoras con niños y adolescentes, como inculcar el respeto al agua o seguir las indicaciones de guardavidas en playas o piletas. También se aconseja enseñarles que, si ven a un niño en problemas, deben pedir ayuda urgente a un adulto y no intentar salvarlo por su cuenta.